¿Cómo ser libres de la insatisfacción? ¿Cómo encontrar paz?
Siddharta
Gotama, el Buda, se planteó estas preguntas en el siglo 6 antes de Cristo.
Luego de su práctica espiritual, concluyó que todo proviene y está en la mente,
y que es ahí donde se encuentran las causas del sufrimiento, así como la clave
para la liberación. Así explicó las causas del sufrimiento: el apego, la aversión
y la ignorancia.
Al observar algún objeto, o captar en nuestra mente un
pensamiento, tendemos a reaccionar inmediatamente ante ello, ya sea con apego
al considerarlo deseable, o con rechazo al creerlo amenazador. Esto nos lleva
por la vida en una fatigante montaña rusa emocional, en un vaivén entre placer
y dolor. Sufrimos al tener que dejar al objeto de nuestro deseo, y al no poder evitar aquello que rechazamos.
Junto al apego y la
aversión, la ignorancia encabeza la triada de “venenos” mentales. No ver las
cosas tal cual son e ignorar la naturaleza impermanente de la realidad, nos
conduce al sufrimiento. Transitando el camino medio, sin reaccionar a nuestras ideas con apegos y odios durante la práctica de la meditación, con un cuerpo relajado y una mente atenta, obtenemos claridad mental, ecuanimidad y paz.